La sociedad civil y los ciudadanos de a pie, a veces escépticos y suspicaces, les ha llamado poderosamente la atención la incorporación de Sonia Guadalupe Sánchez, excónyuge del exgobernador Patricio Chirinos Calero, a la campaña del candidato priista a la minigubernatura de Veracruz, Héctor Yunes Landa.
¿Qué le aportaría al PRI y a Héctor Yunes doña Sonia Guadalupe, con raíces tabasqueñas, formada profesionalmente en Veracruz? Patricio Chirinos Calero (des) gobernó en el período 1992/98, con un entonces secretario general de Gobierno, Miguel Ángel Yunes Linares —hoy candidato de la alianza PAN-PRD a la migubernatura—, que hizo y deshizo de Veracruz.
En ese período Sonia fue la figura estelar de Chirinos, como presidenta del DIF estatal. Su papel al frente de la institución fue calificado como regular por los mandantes. Sus acciones con la población marginada y oprimida del estado fue opacada de alguna manera por la represión, persecución contra reporteros y editores de los Mass Media, y el sórdido espionaje que le imprimió al gobierno chirinista el propio Miguel Ángel Yunes.
La prensa crítica e independiente hizo estragos con la política represiva de la dupla Chirinos-Yunes. Sonia Guadalupe Sánchez nunca se distinguió por ser una acendrada militante del PRI, antes y después de ser la cónyuge y excónyuge de Chirinos Calero. De joven, de acuerdo con la bitácora periodística, tampoco.
Estudió en la Facultad de Derecho de la UV, fue trabajadora de la Tesorería General del estado, hoy Sefiplan, como edecán. Participó en concursos de belleza como Miss Uxpanapa. Y de ahí saltó a la extinta delegación de la Secretaría de Programación y Presupuesto,
donde más tarde se convertiría en miembro del comité estatal del Sindicato con Ezequiel Castañeda Nevares y líder de la agrupación.
Como dirigente sindical de la delegación de la Secretaría de Programación y Presupuesto conocería al entonces secretario de Desarrollo Social (Sedesol), Patricio Chirinos, a la postre candidato y gobernador de Veracruz con el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari. Ahora bien, Sonia no es una política contumaz, se arropó en el apellido Chirinos, hoy por hoy, defenestrado en Veracruz.
Es la primera vez que en la historia contemporánea una excónyuge de un exgobernador hace público su adhesión a la campaña política de un candidato a gobernador. ¿Qué aportará al candidato cuando tiene personajes de sobra de la auténtica clase política de cepa? Por supuesto, su aportación por modesta y singular que sea, es bienvenida para el candidato que está urgido de gente fresca que oxigene a la corrompida clase política que hoy (des) gobierna a Veracruz.
En este impasse del candidato priista a la gubernatura de Veracruz para el bienio 2016/18, antes de entrar a tambor batiente a la campaña de proselitismo electoral de 60 días que arranca el próximo 3 de abril, deberá de sopesar con lupa que los servidores públicos del gobierno duartista que se integren, no estén señalados por la corrupción, impunidad o conflictos de intereses que opaquen su campaña. Si no estaría avalando más de lo mismo: el oprobio, fraude y el saqueo.
Como en los barcos cuando se están yendo a pique, hay decenas y cientos de duartistas que están abandonando el navío, pensando en la inmunidad como diputados locales para que la justicia no los toque y predomine la impunidad, como ocurrió en el gobierno transexenal de Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte.
La aportación que haga a la campaña proselitista Sonia Guadalupe Sánchez será vital para la esposa del candidato del PRI a la gubernatura, Héctor Yunes Landa. Decía el politólogo tuxpeño y filósofo contemporáneo Jesús Reyes Heroles cuando estuvo al frente
del PRI nacional que “la autocrítica logra su auténtica eficacia cuando es oportuna”.
Del valor y de la eficiencia de la política, sentenciaba: “Ella es tan limpia que ni los políticos sucios logran mancharla: ella es tan grande que ni los políticos pequeños logran empequeñecerla. Creemos que en la política el hombre encuentra una manera de realizarse plenamente”.
Por ello, justificaba el poliglota que sólo le faltó haber sido presidente de México: “Debemos hacer que la política rescate su auténtico significado: esencia de la historia y esencia de la verdadera moralidad, de aquella que, como imperativo interno del hombre, viene a ser lo mismo que su propia dignidad”.
Por el bien de Veracruz y de la sociedad democrática hay la esperanza y la fe que los nuevos constructores del parteguas político, no vayan a ser una horda o una oligarquía que soslaye los oprobios, ruindad y villanía de quienes dejan un estado en ruinas y disfuncional.
AL CALCE… Compromiso en prenda. El titular de la Sefiplan, Antonio Gómez Pelegrín, por enésima vez se compromete con los deudores, empresarios, comerciantes, proveedores y medios de comunicación, pagar todos los rezagos que datan desde 2011 para acá antes de la celebración de los comicios del 5 de junio. Hay que verlo para creerlo. Comentarios a gau41@hotmail.com
¿Qué le aportaría al PRI y a Héctor Yunes doña Sonia Guadalupe, con raíces tabasqueñas, formada profesionalmente en Veracruz? Patricio Chirinos Calero (des) gobernó en el período 1992/98, con un entonces secretario general de Gobierno, Miguel Ángel Yunes Linares —hoy candidato de la alianza PAN-PRD a la migubernatura—, que hizo y deshizo de Veracruz.
En ese período Sonia fue la figura estelar de Chirinos, como presidenta del DIF estatal. Su papel al frente de la institución fue calificado como regular por los mandantes. Sus acciones con la población marginada y oprimida del estado fue opacada de alguna manera por la represión, persecución contra reporteros y editores de los Mass Media, y el sórdido espionaje que le imprimió al gobierno chirinista el propio Miguel Ángel Yunes.
La prensa crítica e independiente hizo estragos con la política represiva de la dupla Chirinos-Yunes. Sonia Guadalupe Sánchez nunca se distinguió por ser una acendrada militante del PRI, antes y después de ser la cónyuge y excónyuge de Chirinos Calero. De joven, de acuerdo con la bitácora periodística, tampoco.
Estudió en la Facultad de Derecho de la UV, fue trabajadora de la Tesorería General del estado, hoy Sefiplan, como edecán. Participó en concursos de belleza como Miss Uxpanapa. Y de ahí saltó a la extinta delegación de la Secretaría de Programación y Presupuesto,
donde más tarde se convertiría en miembro del comité estatal del Sindicato con Ezequiel Castañeda Nevares y líder de la agrupación.
Como dirigente sindical de la delegación de la Secretaría de Programación y Presupuesto conocería al entonces secretario de Desarrollo Social (Sedesol), Patricio Chirinos, a la postre candidato y gobernador de Veracruz con el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari. Ahora bien, Sonia no es una política contumaz, se arropó en el apellido Chirinos, hoy por hoy, defenestrado en Veracruz.
Es la primera vez que en la historia contemporánea una excónyuge de un exgobernador hace público su adhesión a la campaña política de un candidato a gobernador. ¿Qué aportará al candidato cuando tiene personajes de sobra de la auténtica clase política de cepa? Por supuesto, su aportación por modesta y singular que sea, es bienvenida para el candidato que está urgido de gente fresca que oxigene a la corrompida clase política que hoy (des) gobierna a Veracruz.
En este impasse del candidato priista a la gubernatura de Veracruz para el bienio 2016/18, antes de entrar a tambor batiente a la campaña de proselitismo electoral de 60 días que arranca el próximo 3 de abril, deberá de sopesar con lupa que los servidores públicos del gobierno duartista que se integren, no estén señalados por la corrupción, impunidad o conflictos de intereses que opaquen su campaña. Si no estaría avalando más de lo mismo: el oprobio, fraude y el saqueo.
Como en los barcos cuando se están yendo a pique, hay decenas y cientos de duartistas que están abandonando el navío, pensando en la inmunidad como diputados locales para que la justicia no los toque y predomine la impunidad, como ocurrió en el gobierno transexenal de Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte.
La aportación que haga a la campaña proselitista Sonia Guadalupe Sánchez será vital para la esposa del candidato del PRI a la gubernatura, Héctor Yunes Landa. Decía el politólogo tuxpeño y filósofo contemporáneo Jesús Reyes Heroles cuando estuvo al frente
del PRI nacional que “la autocrítica logra su auténtica eficacia cuando es oportuna”.
Del valor y de la eficiencia de la política, sentenciaba: “Ella es tan limpia que ni los políticos sucios logran mancharla: ella es tan grande que ni los políticos pequeños logran empequeñecerla. Creemos que en la política el hombre encuentra una manera de realizarse plenamente”.
Por ello, justificaba el poliglota que sólo le faltó haber sido presidente de México: “Debemos hacer que la política rescate su auténtico significado: esencia de la historia y esencia de la verdadera moralidad, de aquella que, como imperativo interno del hombre, viene a ser lo mismo que su propia dignidad”.
Por el bien de Veracruz y de la sociedad democrática hay la esperanza y la fe que los nuevos constructores del parteguas político, no vayan a ser una horda o una oligarquía que soslaye los oprobios, ruindad y villanía de quienes dejan un estado en ruinas y disfuncional.
AL CALCE… Compromiso en prenda. El titular de la Sefiplan, Antonio Gómez Pelegrín, por enésima vez se compromete con los deudores, empresarios, comerciantes, proveedores y medios de comunicación, pagar todos los rezagos que datan desde 2011 para acá antes de la celebración de los comicios del 5 de junio. Hay que verlo para creerlo. Comentarios a gau41@hotmail.com