Veracruz: competitividad (sector Terciario I)
· El sector Terciario (comercio y servicios) en los primeros dos trimestres del presente año manifiesta una de desaceleración, hay un retroceso respecto al cierre 2016. La economía está peor respecto a los efectos del huracán Duarte.
· Es innegable que la contracción del mercado interno de Veracruz para el sector Terciario, por un lado se deriva de una masa salarial menor al cierre 2016, (desempleo y perdida de plazas con buenos salarios), además de los efectos de la inflación. En la otra mano, está presente el repunte de las actividades delictivas.
Para abordar el tema del sector Terciario, que comprende principalmente actividades relacionadas con el comercio, restaurantes y hoteles, servicios de toda índole, en las que destaca los de tipo profesional (educativo, médico, técnico y financiero), así como el transporte y gobierno, recordare que es el que más peso tiene en la economía veracruzana, representa el 57.7 por ciento del Producto Interno Bruto Estatal (PIBE). El sector Industrial se ubica en segundo lugar (37.9 por ciento) y con una mínima participación, muy lejos de su potencial productivo, está el sector Primario (agropecuario) con un 4.3 por ciento. El cual repito, tiene un estancamiento de 20 años, no ha variado el valor real de su producción, gracias a una plaga burocrática estatal, caracterizada por su ineficiencia, corrupción y sin escrúpulos para afectar a los que menos tienen, que son nuestros hermanos indígenas veracruzanos dedicados a las labores del campo.
Pero abordando el tema en comento, el crecimiento de este Sector es el que ha propiciado que la economía en su conjunto no se derrumbe, en razón a como se ha explicado en colaboraciones anteriores, el sector Secundario experimenta una fuerte contracción en el periodo 2013-2016. Para el presente año 2017, conforme a los indicadores macroeconómicos de coyuntura que publica INEGI, de enero a julio, Veracruz experimenta 7 meses consecutivos de retroceso industrial. Ante este panorama, las consecuencias son fácil de deducir: el sector Terciario en los primeros dos trimestres del presente año manifiesta una de desaceleración, hay un retroceso respecto al cierre 2016. La economía está peor respecto a los efectos del huracán Duarte, el remedio del cambio hasta la fecha no ha funcionado, frustración y enojo ciudadano presente.
Es innegable que la contracción del mercado interno de Veracruz para el sector Terciario, se deriva de una masa salarial menor al cierre 2016. Por un lado, se han perdido plazas laborales con buenos salarios, además de la pérdida del poder adquisitivo de la clase trabajadora por los efectos del aumento generalizado de los precios de las mercancías y servicios, especialmente los canasta básica de alimentos. En la otra mano, está presente el repunte de las actividades delictivas, no hay que olvidar que la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública marzo-abril 2017 (ENVIPE), señala un avance respecto al 2016, de un 85.1 pasó al 89.9 por ciento. Nueve de cada diez ciudadanos veracruzanos tienen la sensación de vivir en un estado inseguro. Pero analizado la percepción por sexo, la población de mujeres en Veracruz observa el indicador más alto del país con un 91.3 por ciento, le sigue el Estado de México (90.7 por ciento). Así también continúa la presencia de la extorción, es el delito más denunciado. Ahora resulta que los ciudadanos de pie, pagamos doble tributación: la que corresponde a los tres órdenes de gobierno y a los criminales.
Respecto a los antes expuesto, afortunadamente la academia ha publicado investigaciones sobre los efectos de la delincuencia en las actividades productivas, entre las que destaca la Universidad de Harvard con de Dra. Viridiana Ríos, misma que presento su estudio “El Impacto del crimen y violencia sobre diversos sectores de la economía en México”, el 21 de enero 2016, en el Centro Wilson, Washington DC., donde asistió entre otros, el embajador en aquel entonces de México en USA, Miguel E. Basáñez. Resalta que las actividades productivas más vulnerables a la acción de los delincuentes son las enumeradas al inicio de la presente colaboración, es decir el sector Terciario es el más afectado, colocando al pequeño comercio como el más frágil, basta recorrer la ciudad de Xalapa, y por doquier hay locales en renta. A la gran industria y corporativos los malandros no los tocan ni con el pétalo de una rosa. Como siempre al perro más flaco se le pegan más las pulgas. La mejor campaña política es la de un gobierno con resultados.
· Es innegable que la contracción del mercado interno de Veracruz para el sector Terciario, por un lado se deriva de una masa salarial menor al cierre 2016, (desempleo y perdida de plazas con buenos salarios), además de los efectos de la inflación. En la otra mano, está presente el repunte de las actividades delictivas.
Para abordar el tema del sector Terciario, que comprende principalmente actividades relacionadas con el comercio, restaurantes y hoteles, servicios de toda índole, en las que destaca los de tipo profesional (educativo, médico, técnico y financiero), así como el transporte y gobierno, recordare que es el que más peso tiene en la economía veracruzana, representa el 57.7 por ciento del Producto Interno Bruto Estatal (PIBE). El sector Industrial se ubica en segundo lugar (37.9 por ciento) y con una mínima participación, muy lejos de su potencial productivo, está el sector Primario (agropecuario) con un 4.3 por ciento. El cual repito, tiene un estancamiento de 20 años, no ha variado el valor real de su producción, gracias a una plaga burocrática estatal, caracterizada por su ineficiencia, corrupción y sin escrúpulos para afectar a los que menos tienen, que son nuestros hermanos indígenas veracruzanos dedicados a las labores del campo.
Pero abordando el tema en comento, el crecimiento de este Sector es el que ha propiciado que la economía en su conjunto no se derrumbe, en razón a como se ha explicado en colaboraciones anteriores, el sector Secundario experimenta una fuerte contracción en el periodo 2013-2016. Para el presente año 2017, conforme a los indicadores macroeconómicos de coyuntura que publica INEGI, de enero a julio, Veracruz experimenta 7 meses consecutivos de retroceso industrial. Ante este panorama, las consecuencias son fácil de deducir: el sector Terciario en los primeros dos trimestres del presente año manifiesta una de desaceleración, hay un retroceso respecto al cierre 2016. La economía está peor respecto a los efectos del huracán Duarte, el remedio del cambio hasta la fecha no ha funcionado, frustración y enojo ciudadano presente.
Es innegable que la contracción del mercado interno de Veracruz para el sector Terciario, se deriva de una masa salarial menor al cierre 2016. Por un lado, se han perdido plazas laborales con buenos salarios, además de la pérdida del poder adquisitivo de la clase trabajadora por los efectos del aumento generalizado de los precios de las mercancías y servicios, especialmente los canasta básica de alimentos. En la otra mano, está presente el repunte de las actividades delictivas, no hay que olvidar que la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública marzo-abril 2017 (ENVIPE), señala un avance respecto al 2016, de un 85.1 pasó al 89.9 por ciento. Nueve de cada diez ciudadanos veracruzanos tienen la sensación de vivir en un estado inseguro. Pero analizado la percepción por sexo, la población de mujeres en Veracruz observa el indicador más alto del país con un 91.3 por ciento, le sigue el Estado de México (90.7 por ciento). Así también continúa la presencia de la extorción, es el delito más denunciado. Ahora resulta que los ciudadanos de pie, pagamos doble tributación: la que corresponde a los tres órdenes de gobierno y a los criminales.
Respecto a los antes expuesto, afortunadamente la academia ha publicado investigaciones sobre los efectos de la delincuencia en las actividades productivas, entre las que destaca la Universidad de Harvard con de Dra. Viridiana Ríos, misma que presento su estudio “El Impacto del crimen y violencia sobre diversos sectores de la economía en México”, el 21 de enero 2016, en el Centro Wilson, Washington DC., donde asistió entre otros, el embajador en aquel entonces de México en USA, Miguel E. Basáñez. Resalta que las actividades productivas más vulnerables a la acción de los delincuentes son las enumeradas al inicio de la presente colaboración, es decir el sector Terciario es el más afectado, colocando al pequeño comercio como el más frágil, basta recorrer la ciudad de Xalapa, y por doquier hay locales en renta. A la gran industria y corporativos los malandros no los tocan ni con el pétalo de una rosa. Como siempre al perro más flaco se le pegan más las pulgas. La mejor campaña política es la de un gobierno con resultados.
